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Pasar por la puerta del restaurante Colombiano El Paisa en el centro de Long Beach es experimentar un pedacito de la nación sudamericana, encajado entre Alamitos Avenue y E. 17th Street.

Música cumbia suena mientras el aroma de las empanadas tostadas, los buñuelos redondeados y pan de bonos con queso que descansan sobre le mostrador caliente abrazan a los que entran. Cerca de la caja registradora hay un mini-mercado de refrescos Colombianos, ingredientes para hacer arepas y dulces variados.

Decoraciones de sombreros volteados y automobiles de marca Willys Jeep repletos de bolsas de café adornan el comedor. La noche de karaoke convierte el restaurante en un salón de baile los viernes por la noche.

Es el segundo restaurante que Luis Melvin Henriquez, de 35 años, ha lanzado conjuntamente en Long Beach. Conocido como “Melvin el paisa”, Henríquez y su hermana también operan una panadería y pupusería Salvadoreña llamada La Guanaquita en el norte de Long Beach.

Los dos restaurantes rinden homenaje a su madre Salvadoreña y su padre Colombiano.

Henríquez se mudó de Armenia, Colombia, a Nueva York en 2001. Trabajó en varios restaurantes, comenzó como lavaplatos y finalmente se convirtió en gerente de turno.

Se mudó a California y abrió El Paisa en octubre de 2015 para llenar un vacío de comida latinoamericana que dice que faltaba en la costa oeste.

“A California le falta ese sasón especial de Colombia”, dijo Henríquez. “Tenemos Mexicano, Honduras, Guatemala, Cuba pero nos falta Colombia. Muchas culturas han construido a Long Beach”.

Henríquez dice que la comida Colombiana es un “desfile de sabores” y atribuye la producción de esos platos a los fértiles terrenos agrícolas del país.

Las frutas y verduras exóticas combinadas con diferentes métodos de preparación de la carne crean platos distintos como la bandeja paisa, también llamada la bandeja campesina, que es un plato simbólico en la región donde creció Henríquez: las montañas del departamento Colombiano del Quindío.

El plato “campestre” incluye bistec a la parrilla, huevo frito, torta de maíz, cerdo, salchicha, plátanos dulces, aguacate, arroz y frijoles. Es un plato pesado y por una buena razón. Henríquez dijo que el plato fue creado originalmente para alimentar a los agricultores que trabajaban largas horas entre los valles y cordilleras.

“’Paisa’ representa a la gente humilde, gente que trabaja en el campo”, dijo Henríquez. “El estado del Quindío ofrece mucha naturaleza y frutas exóticas que llevan adelante la cultura”.

El restaurante ha desarrollado una base entusiasta de clientes habituales. Ese apoyo se convirtió en un salvavidas para Henríquez, ya que la pandemia obligó a su restaurante a ofrecer comida para llevar solo el año pasado.

La música en vivo y las noches festivas de los fines de semana llegaron a un abrupto final, pero los fanáticos de sus platos aún hicieron pedidos y continuaron apoyando al restaurante.

“No ha sido fácil”, dijo Henríquez. “Pero mucha gente nos ha apoyado para llegar a este punto”.

Actualmente, solo hay un restaurante El Paisa, pero Henríquez está visualizando un impulso para franquiciar el negocio. Henríquez ya ha tenido éxito en promover su restaurante.

La página oficial de Instagram del restaurante El Paisa ha acumulado más de 40,000 seguidores. Henríquez también ha sido presentado en la estación de noticias en español Univision para mostrar la comida Colombiana tradicional que se suele comer durante la Navidad.

“Somos una empresa familiar con muchos sueños”, dijo Henríquez. “Queremos crear oportunidades de empleo para ayudar a los latinos triunfen en el negocio de los restaurantes”.