El Centro de Convenciones de Long Beach podría albergar hasta 1,000 niños migrantes durante cuatro meses, ya que el número de menores no acompañados ha aumentado en la frontera con México, dijeron las autoridades el lunes.
La ciudad dijo el lunes en un comunicado que el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. ha indicado que le gustaría seguir adelante con el plan para Long Beach, ya que los centros de convenciones en Dallas y San Diego ya se han convertido a servir como refugios de emergencia.
El ayuntamiento de Long Beach revisará la propuesta en una reunión a puerta cerrada a las 4:30 p.m. el martes. La discusión puede suceder a puertas cerradas porque las reglas de las reuniones abiertas estatales permiten que las negociaciones de bienes raíces se discutan en forma privada.
Se espera que el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. alquile la propiedad a la ciudad, pero los términos todavía no se han establecido.
“Long Beach tiene una larga y orgullosa historia de dar la bienvenida y ayudar a los inmigrantes y refugiados”, dijo el alcalde Robert García en un comunicado en inglés. “Desde nuestra comunidad camboyana hasta el trabajo realizado por nuestras iglesias y organizaciones religiosas, hemos liderado con compasión y amabilidad. Como inmigrante, sé lo importante que es apoyar a todas las personas, especialmente a los niños, y estoy orgulloso de apoyar a nuestro país en esta importante labor”.
El estacionamiento del Centro de Convenciones y la entrada principal en el Teatro de Terrace actualmente sirven como sitios de vacunaciones masivas de COVID-19 con cientos de residentes y trabajadores que llegan todos los días para recibir las vacunas.
Sin embargo, el Centro de Convenciones y el estadio han permanecido prácticamente vacíos porque la pandemia ha puesto un fin a las grandes reuniones.
García en una entrevista el lunes dijo que la ciudad y los Servicios Humanos y de Salud se asegurarán de que no haya ningún impacto en las áreas de vacunación, que están separadas del espacio interior del Centro de Convenciones y las salas de reuniones que actualmente se están considerando para el refugio.
Si se aprueba el plan, Long Beach podría ver que los niños empiezan a llegar la próxima semana, dijo García, y agregó que el sistema en Long Beach se parecería mucho al sistema en San Diego.
La ciudad en los próximos días tendrá la información sobre dónde las personas pueden ofrecerse como voluntarios para ayudar, él dijo. Long Beach también se asociará con varias organizaciones comunitarias y religiosas.
García dijo que está humillado por el apoyo abrumador por la comunidad.
“Se alinea con la ciudad como un lugar que ha sido muy progresista y cuidadoso y tiene una historia de este tipo de trabajo”, él dijo.
La ciudad en su declaración dijo que el Centro de Convenciones sería el “sitio óptimo para proporcionar vivienda, comida, servicios recreativos y otros servicios a estos niños necesitados”.
Los niños estarán protegidos por un período de 90 a 120 días hasta que puedan ser transportados a una vivienda segura en otro lugar de los EE. UU.
“El gobierno federal sería responsable de financiar y proporcionar los principales servicios necesarios para cuidar a los niños, con el apoyo de Long Beach, proporcionando las instalaciones y haciendo conexiones con otros servicios gubernamentales y sin fines de lucro apropiados”, dijeron las autoridades.
El número de niños migrantes no acompañados en la frontera entre los Estados Unidos y México ha aumentado significativamente desde el inicio de la pandemia, y muchos huyen de la violencia o la pobreza en sus países de origen.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos federal es responsable de albergar a los niños después de que sean transferidos fuera de la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU.
Hasta el domingo, casi 7,000 niños estaban bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU., mientras que más de 14,287 estaban en refugios del Departamento de Salud y Servicios Humanos. El número anterior en el departamento fue 11,551 el martes pasado.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos en un comunicado en inglés el lunes dijo:
“Estamos trabajando con la ciudad para explorar la posibilidad de que el Centro de Convenciones de Long Beach se convierta en un sitio de admisión de emergencia para niños no acompañados. Notificaremos a los funcionarios estatales y locales mucho antes de la apertura de cualquier sitio temporal”.
El departamento está albergando a unos 2,000 jóvenes varones en el Centro de Convenciones de Kay Bailey Hutchison en Dallas y a más de mil mujeres jóvenes en el Centro de Convenciones de San Diego, quienes llegaron el mes pasado.
Esta semana el sitio en San Diego estaba cerca de su capacidad, según informes de noticias.
Varios de los nueve concejales de Long Beach expresaron su apoyo al plan el lunes.
La concejala Cindy Allen, cuyo segundo distrito incluye el Centro de Convenciones, dijo que el espacio, que actualmente no puede tener eventos dentro del edificio, brinda una “tremenda oportunidad para ayudar sin afectar las operaciones o negocios”.
“A medida que nuestro país busca garantizar mejor la seguridad de los menores no acompañados que cruzan la frontera sur y conectarlos con sus familias y tutores, cada comunidad debe estar lista para hacer nuestra parte para ayudar”, dijo en un comunicado en inglés.
El concejal Rex Richardson, que representa al noveno distrito, dijo que Long Beach tiene la “responsabilidad moral” de mostrar compasión en una crisis humanitaria en curso.
“Somos una ciudad que sirve como puerta de entrada al mundo y tiene un legado de recibir inmigrantes”, dijo en un comunicado en inglés. “Al proporcionar refugio temporal a los niños migrantes, estamos a la altura de nuestros valores y lideramos con el ejemplo”.
La concejala Stacy Mungo del Distrito 5 dijo que la ciudad debe considerar las precauciones para mantener seguros a los niños y la comunidad, especialmente con el aumento de las variantes de COVID-19.
“El centro tiene numerosas comunidades vulnerables que ya han sido devastadas por el COVID y es nuestro deber asegurar que todas las medidas estén en su lugar y que los fondos federales respalden todos los componentes del programa en caso de que avancemos”, dijo en un comunicado en inglés. “El artículo de mañana permitiría al administrador de la ciudad negociar los términos, pero de ninguna manera está de acuerdo con nada y se necesitaría mucha más información para que las comunidades que representamos puedan opinar sobre esta importante discusión”.
“Los niños no deben estar en jaulas en la frontera”, dijo el concejal del distrito 7, Roberto Uranga, en un comunicado en inglés. “Les damos una compasiva bienvenida a Long Beach y estaremos allí para ellos con amor y cuidado”.
El Concejal del Distrito 8 Al Austin expresó su apoyo en un Tweet.
“En tiempos de crisis, se supone que los centros de convenciones se utilizan como un recurso público de emergencia”, él dijo en inglés en el Tweet. “Estos tiempos extraordinarios requieren una respuesta extraordinaria.”
Traducido por Crystal Niebla