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Los delitos violentos aumentaron dramáticamente en Long Beach a principios del año, según las últimas cifras publicadas por la policía, y las autoridades dicen que la pandemia es, al menos parcialmente, la culpable.

Los delitos violentos en la ciudad subieron un 32% en enero en comparación con enero de 2020, según un memorando de la policía publicado la semana pasada. Y el aumento es aún más pronunciado en algunas áreas de la ciudad.

La División Norte del departamento de policía, que patrulla la mayor parte del norte de Long Beach, registró un aumento del 74% en delitos violentos en enero en comparación con el año pasado. La División Oeste, que supervisa la mayor parte del oeste de Long Beach y las partes central y norte, vio un aumento cercano al 48%, el segundo aumento más alto entre las divisiones de patrulla.

En un memorando de tres páginas publicado la semana pasada, el jefe del Departamento de Policía de Long Beach,(LBPD por sus siglas en inglés), Robert Luna, escribió que su departamento cree que la “posible causa” de estos aumentos de delitos está relacionada con los impactos de la pandemia en el sistema de justicia penal y la comunidad.

Específicamente, escribió que las causas incluyen los prisiones y las cárceles que liberan a un gran número de reclusos para reducir el riesgo de exposición al COVID-19, más delincuentes reincidentes liberados bajo fianza, juicios y otros procedimientos judiciales que ven retrasos significativos y un “número récord de ventas de armas en 2020”, lo que significa que “hay más armas en la calle”.

Otros factores también podrían estar influyendo en las tendencias delictivas, pero la policía dijo que estos “no se pueden ignorar”.

“Estos aumentos no tienen precedentes”, dijo en inglés la portavoz del LBPD, Arantxa Chavarria, en un correo electrónico.

Los tiroteos, específicamente, también han aumentado. La policía de Long Beach respondió a 57 tiroteos en enero, 24 de los cuales involucraron a una persona herida o muerta, según datos policiales obtenidos por el Post a través de una solicitud de registros públicos.

Un oficial de la LBPD graba la escena de un tiroteo en Central Long Beach el sábado 20 de marzo de 2021. Foto por Sebastian Echeverry.

El LBPD preparó el memorando en respuesta a una solicitud del ayuntamiento en la que se les pedía que explicaran el aumento de la delincuencia durante el año pasado. La policía también describió lo que están haciendo para tratar de combatir los aumentos.

En respuesta a los recientes tiroteos, en febrero la policía reasignó empleados fuera de sus asignaciones principales para crear un Equipo de Respuesta Coordinada (CRT por sus siglas en inglés), que es un equipo temporal compuesto por detectives, oficiales de patrulla, un analista de delitos de división, un oficial de información pública, y un especialista en ciencias forenses que se reúne a diario para discutir estrategias para reducir los delitos violentos con un enfoque en la violencia armada, los poseedores prohibidos, las “ghost guns” (“armas fantasma,” armas de fuego caseras imposibles de rastrear) y la identificación de los conductores que contribuyen al aumento de los delitos violentos, Luna escribió.

Desde la implementación del CRT, escribió Luna en el memorando, la policía arrestó a nueve poseedores de armas prohibidas y recuperó 13 armas, dos de las cuales eran armas fantasmas. Los tiroteos también disminuyeron de 57 en enero a 34 en febrero, aunque ese total todavía fue significativamente más alto de los 19 tiroteos que sucedieron en febrero de 2020.

La concejala del Distrito 1 Mary Zendejas, que supervisa partes del oeste, el céntrico y el centro de Long Beach, dijo que pidió el memorando porque quería respuestas y soluciones para el aumento de los delitos violentos en su área.

Luna escribió en el informe que cree que otros factores que contribuyeron al crimen durante la pandemia incluyen el cierre de las escuelas y la falta de programaciones.

“… Me encantaría vernos abordar esta brecha en particular, así como otras desigualdades y preocupaciones de calidad de vida como una forma de mantener seguro el Primer Distrito”, dijo Zendejas en inglés en un correo electrónico. Ella ya está viendo programas pilotos de prevención de delitos, el Long Beach Activando Comunidades Seguras (Long Beach Activating Safe Communities), que aún no se ha lanzado, y las Caminatas del Vecindario (Neighborhood Walks) implementado en su distrito.

El concejal Al Austin, que supervisa partes del norte de Long Beach en el Distrito 8, está de acuerdo.

“Espero que lo más pronto que podamos implementar los programas, mejor”, él dijo, y agregó que la ciudad ya tiene una variedad de programas de apoyo establecidos de la Ley de Recuperación de Long Beach (Long Beach Recovery Act) y el Marco para la Reconciliación (Framework for Reconciliation).

En medio del aumento de la delincuencia, también espera mejoras cuando la gente regrese a la escuela y trabaje y ponga en marcha la economía de la ciudad.

“Hay mucha tensión en nuestra comunidad en este momento”, él dijo.